sábado, 10 de agosto de 2013

LA VIDA DE BRIAN


Título original: Life of Brian

Título hispanoamericano: Toda una Vida

Año: 1979

Director: Terry Jones

Género: Paralelismo mesiánico desemboca en un periplo de aventuras judaicas / Comedia / Religioso / Erótico / Revolucionario / Ciencia Ficción / De Persona

La Vida de Brian siempre ha corrido paralela a la de cierto profeta cristiano al que no podemos mencionar si queremos mantener el laicismo de este blog. Cuando se acerca a la crisis de los treinta (un problema muy común a principios del siglo I) cae en la cuenta de que vender vísceras de roedores no es el sueño de su infancia, tal y como él pensaba, y se plantea su situación social así como existencial, uniéndose al Frente Judaico Popular, una de las múltiples células terroristas islámicas de la época, convirtiéndose en un feroz luchador por el derecho a parir y la expulsión de los romanos.

El Imperio Romano es severo, severo pero justo

Brain llevará una aventura amorosa y revolucionaria hasta que en una huida se hace pasar por un predicador. Las locuras comienzan cuando la gente, ansiosa de una fe que les guíe, se muestra receptiva a las palabras de este mamarrachístico profeta. Pronto, su popularidad (recién alcanzada por mostrar mostrarle los genitales a una cultura cansada de su represiva sobriedad) será vista como una amenaza por Poncio Pilato y su amigo Pijus Magnificus.

Don't fuck with the Poncio

Terry Jones dirige y coescribe junto a sus compañeros de Monty Python la segunda película de este grupo, que en plena decadencia del punk deconstruyó nuestra visión del cristianismo UNA VEZ MÁS.

J. odia la película, puesto que carece de fundamentos históricos y el realismo que tantos fans esperaban de los pitones.

M. cree que mereció la pena dar cinco años de religión en la escuela para que le pusieran esta película.

La Zapatilla: Causa de la primera gran escisión del brianismo

Conclusión: El humor tiene límites y creo que la religión es uno de ellos. No entiendo cómo alguien puede tener la mala educación de burlarse de tantos millones de personas, así como de Dios (que cuenta como cinco millones de personas). Lo único bueno es que al protagonista lo dobla Enrique de La Que Se Avecina. 10/10

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